Las preguntas se repiten y resuenan como un eco: ¿Cómo volver a Jean Genet, cómo y para qué? ¿Cómo traer a Genet este mundo - un mundo superficialmente muy distinto del que dejó en 1986 - pero esencialmente igual? ¿A qué contexto vuelve Genet, de qué manera, bajo qué condiciones?
¿Cómo hacer para que su espíritu pelee con la misma fuerza de ayer las nuevas batallas, cuáles son esas batallas? ¿Contra qué se puede pelear sin ser absorbido por el mercado? Y si no es absorbido por el mercado: ¿qué hacer para que la pelea no quede flotando en el aire como un gesto aislado y solitario?
Genet vuelve para pelear contra la misma sociedad que lo encarceló, contra la misma sociedad que multiplicó su figura en forma de monumentos.
Vuelve para seguir cuestionando el entramado de las leyes y la moral que el mundo constituye en su falsa apariencia de paz y justicia.
Clasificaciones: Teatro, Adultos